
Los traumatismos dentarios normalmente ocurren en niños, aunque estos pueden suceder en pacientes de todas las edades como resultado de un accidente automovilístico, deportivo, riñas, caídas, etc. Del 50 al 60% de los traumas ocurren en el hogar ó bajo techo, mayormente entre las edades de 2 a 5 años, que es la etapa en la que el niño esta perfeccionando sus andar y de 8 a 12 años que es cuando se inicia en los deportes.
Existen diferentes tipos de traumatismos dentarios que pueden afectar los tejidos duros y/o blandos de los dientes y el tratamiento de estos dependerá del tipo y severidad de los mismos.
Si se produce la avulsión (salida) de uno ó más dientes de la boca, deben ser recogidos por la corona y no por la raíz y ser manipulados lo menos posible. Estos deben ser conservados en un medio húmedo como leche, suero fisiológico, solución salina (líquido que se usa para guardar los lentes de contacto), agua de tomar con una pizca de sal, ó la misma saliva del paciente, aunque lo ideal es recolocarlo en su lugar, dentro de la boca, fijándose en la posición y la forma en que están colocados los dientes vecinos. El tiempo que duren fuera de la boca y el medio donde se conserven influirá definitivamente en el pronóstico de permanencia del diente en boca. El tiempo máximo que un diente puede permanecer fuera de boca es de 30 minutos, a partir de ahí las fibras que sujetan al diente dentro del hueso pueden empezar a necrosarse y el organismo reconocer el diente como un cuerpo extraño y reabsorberlo con la subsecuente perdida de la pieza.
Una vez que el médico haya descartado daños físicos ó neurológicos que puedan hacer peligrar la vida, deberá ser llevado al especialista en endodoncia, el cual realizará un examen exhaustivo, clínico y radiográfico. El especialista puede encontrarse con diferentes tipos de traumas dentarios aun en el mismo paciente, que puede ir desde pequeñas fracturas en la corona del diente, que se reparan con simple restauraciones, ó fracturas que exponen la pulpa ó nervio del diente donde se deberá realizar el tratamiento endodóntico.
En ocasiones pueden encontrarse dientes que a simple vista parecen no haber sufrido daños, pero al examen radiográfico presenten fracturas a cualquier nivel de la raíz. Estos casos con frecuencia es necesario fijarlos ó ferulizarlos por un tiempo y luego se controlará y se determinará el tratamiento adecuado.
En otros casos el diente puede moverse hacia dentro del hueso ó salirse parcialmente, el especialista lo recolocará según la posición que tenia antes en la boca, de esto ser posible, y lo fijará ó ferulizará. Para el primer caso le realizará el tratamiento endodóntico y le colocará un medicamento dentro del conducto, el cual se lo recambiará cada 2 ó 3 meses hasta que determine que la pieza están en condiciones ó no de que se le termine el tratamiento. En el segundo caso se realizarán evaluaciones clínicas y radiográficas por un tiempo para determinar si existe la necesidad de realizar un tratamiento endodóntico ó no.
Si el diente salió de la boca y no fue posible recolocarlo antes de la visita al endodoncista ó especialista en endodoncia, esté lo examinará, lo lavará adecuadamente, ferulizandolo o fijándolo y en una próxima cita se realizara el tratamiento endodóntico.